sábado, 22 de junio de 2013

TRADICIONES, MITOS y LEYENDAS: ZARAGOZA



CAPITULO II: Salduba
Prematura muerte de Túbal- Viaje de los Iberos--Instalación de éstos en Auripa.
¡Yo volveré! Murmuraba Túbal al perder de vista a Auripa, continuando su viaje aguas arriba del río Ebro; y la antes bella ciudad, según los restos que de ella existieran, quedó habitada por las inocentes golondrinas, (tan bienhechoras de las tiernas plantas), que colgaban sus nidos en las desvencijadas cornisas y de la diversidad de pájaros que revoloteaban alrededor de los derruidos edificios.
Pero Túbal no pudo satisfacer sus anhelantes deseos; sorprendióle la muerte en su triunfal carrera y bajó á la tumba arrastrando en pos de sí la suerte de la desgraciada Auripa.
No tardó mucho tiempo en extenderse entre los íberos, que en aquellos remotos tiempos ocupaban desde las vertientes del Cáucaso hasta las inmensas llanuras de Asiria, la fama de la tierra que descubriera Túbal en su expedición, y acosados todos por el deseo de admirar y explotar á la vez las grandes riquezas que de aquel país hasta entonces desconocido las contaran, pronto se concertaron buen número de ellos y acordaron dirigirse hacia la desconocida Península.
Audaces y guerreros por temperamento, proclamaron á un jefe que le denominaron Ibero, prepararon sus bajeles con rapidez pasmosa, y embarcados con sus familias, lanzáronse por los mares en busca de la tierra que tan ricos tesoros como hermoso panorama ofrecía, siguiendo el mismo camino emprendido por Túbal.
Llenos de febril entusiasmo y acosados todos por un mismo y constante deseo, dirigían sus naves con rumbo á la Península ibérica, é impelidos por viento favorable pronto divisaron los horizontes de aquel terreno que tan pingüe alojamiento les ofreciera.
Inmenso grito de júbilo resonó en todas las embarcaciones al llegar á las costas de España en el mar Mediterráneo; é Ibero, jefe de la expedición, á pesar de asombrarse de que nadie saliera á las playas á la llegada de los extranjeros, lo que le demostraba lo poco poblado que estaba el país, iba dejando en tierra á los que rendidos por la fatiga de tan largo viaje así lo solicitaban; es decir, hacía lo mismo que hizo Túbal al cruzar los mares con sus bajeles por vez primera y tocar en las costas de nuestra privilegiada tierra.
Navegando con el mismo rumbo que lo hiciera el desgraciado Túbal, pronto se encontraron los nuevos expedicionarios en unas costas (las de Tortosa), en las que desemboca el caudaloso Ebro, que ellos denominaron desde aquel momento Ibero; y guiados por su jefe, del que tomaron el nombre para bautizar al río que empezaban á surcar contra la corriente ó el curso de las aguas, admiraron asombrados los inmensos é incultos llanos, las escarpadas rocas, las floridas praderas, los ásperos peñascos, los amenos valles y pintorescas sierras, que ante su extasiada vista se presentaban, hasta llegar á una inmensa llanura que les convidaba á hacer alto en su penosa excursión.
Así lo hicieron, y echando pié á tierra, maravillados de tan bello panorama como el que ante sus ojos se presentaba, empezaron á recorrer la inmensa planicie, descubriendo á pocos pasos restos magníficos, aunque ruinas tristes, de la grandiosa Auripa, según la había denominado Túbal, y convencidos muchos de los iberos de las riquezas de aquel suelo, virgen todavía, pudiera proporcionarles, pronto rodearon á su jefe diciéndole, según varios autores:
"Las ruinas de este pueblo son muchísimo más preciosas que muchas ciudades que hoy se levantan; permitidnos habitarlas y dadnos un patriarca que nos dirija."
Accedió á sus pretensiones Ibero, jefe de la expedición; dictóles breves pero sabias leyes que les gobernasen, dioles armas y ganados, y encargándoles el cumplimiento exacto de cuanto les ordenaba, alejose de los derrumbados muros de Auripa acompañado de algunos iberos y siguió su impertérrita marcha hasta encontrarse con los descendientes de Túbal, á quienes buscaba con objeto de ofrecerles la paz ó la guerra.
Y desde estos momentos empieza ya la historia de Zaragoza después del diluvio.
Poco tardaron los iberos en alzar sus cabañas recostadas sobre los derruidos paredones, y el sol empezó á iluminar los pajizos techos de aquellas viviendas, tan solo para resguardarse los nuevos habitantes de los rigores del tiempo.
Dedicábanse al pastoreo de sus ganados en las inmensas praderas que tan feraz suelo les brindaba, y á poco ocurrióseles buscar nombre propio al pueblo que empezaban á fundar.
Discurriendo sobre punto tan importante, é ignorando á la vez el nombre de Auripa que le diera Túbal, buscaron no en balde titulo que darle, y fundándose en las ricas y abundantes salinas que á la entonces aldea circulaban diéronle el nombre de Salduba.

lunes, 17 de junio de 2013

NOTA DE PRENSA: AMICS DE FRAGA



Por Amics de Fraga
La nueva Ley de Lenguas: ¡ya era hora!
Ya era hora de que el Gobierno de Aragón defendiera los intereses culturales de los aragoneses de la zona oriental de Aragón, pues los fragatinos nos hemos sentido habitualmente desamparados por los gobiernos respectivos de nuestra Comunidad. En 1995 el Gobierno aragonés promovió una encuesta sociolingüística que desarrollaron 4 catedráticos de la Universidad de Zaragoza en la que se concluía que los habitantes de la zona oriental de Aragón, entre ellos los fragatinos, no aceptaban que su lengua fuera catalán, que había una riqueza lingüística grande y por desarrollar y que reclamaban más atención por parte de la Administración aragonesa. Y ha costado 18 años hasta que por fin el gobierno actual de Aragón ha aprobado una Ley de Lenguas que defiende y promocionará nuestro patrimonio cultural y lingüístico.
El PP de Aragón ya llevaba en su campaña electoral un lema que decía: “No a la imposición del catalán” y anunció que modificaría la Ley de Lenguas que había aprobado el PSOE con la complicidad de CHA por la que imponía la catalanización de Aragón. Y la propuesta electoral del PP fue aprobada-avalada por una mayoría de aragoneses y mereció el respaldo del PAR y sus votantes, en plena sintonía con el PP.
Esta nueva Ley de Lenguas define que: “en Aragón, junto al castellano, lengua mayoritaria y oficial en todo su territorio, existen lenguas y modalidades lingüísticas propias que se hablan en determinadas zonas y constituyen un rico legado de nuestra Comunidad Autónoma… configuradoras de una historia y cultura propias, que han de ser especialmente protegidas y fomentadas por la Administración Aragonesa”. Sabiendo que esta Ley está respaldando al fragatí, ¿qué más podemos pedir?
Pero desde Cataluña y los pancatalanistas se ha levantado una reacción furibunda de quejas y protestas contra esa Ley, contra el Gobierno de Aragón y contra los aragoneses que los han votado, apoyada con burlas e insultos. Nunca los aragoneses nos hemos burlado de una ley catalana ni de la Generalitat, más bien hemos tenido que quejarnos de alguna actuación poco respetuosa por su parte.
Desde el nacionalismo catalán nos faltan al respeto reiteradamente, y han aprovechado esta Ley que no les gusta para iniciar una campaña de burla y calumnias contra el Gobierno de Aragón y los aragoneses: de forma maliciosa han engendrado expresiones inexistentes y burlonas para referirse a las lenguas propias que se hablan en Aragón, y hacen promoción de dichas expresiones falsas y humillantes engañando a la opinión pública al decir que las mismas son usadas por la Ley y por las autoridades aragonesas, en clara intención de desprestigiar al Gobierno de Aragón. Y muchos políticos, medios y representantes del pueblo catalán (los medios de difusión están llenos de ejemplos) se han apuntado a esa burla, sin el más mínimo respeto a sus equivalentes aragoneses, al derecho de libertad de expresión y de opinión y a que todo esto está respaldado por la mayoría de aragoneses. Y algunos políticos aragoneses no han dudado en apuntarse a esa campaña de burla, poniéndose una vez más a favor de los intereses catalanistas.
El fragatí tiene 900 años de historia y si lo hemos sabido mantener hasta ahora no les ha de extrañar que sigamos defendiéndolo de los que lo quieren absorberlo y aniquilarlo. La asociación cultural AMICS DE FRAGA tiene en uno de sus objetivos “El estudio, desarrollo y defensa de la lengua de Fraga, fragatí,…”. Y el fragatí está definido como una modalidad de la lengua “Aragonés oriental”, como demuestran los estudios ya realizados. Esta defensa no da derecho a nadie a insultarnos ni despreciarnos porque no aceptemos ser esclavos de unos intereses políticos.
Desde Cataluña se creen con derecho a gobernar y dirigir espiritualmente a sus vecinos (aragoneses, valencianos, baleares, incluso sur de Francia), dictando cómo deben de actuar y de opinar. Es un clarísimo ejemplo de antidemocracia y falta de respeto a las libertades de sus vecinos, tanto de pensamiento como de opinión, de expresión y de actuación…
Aragón y Fraga deben salvaguardar su patrimonio histórico, cultural y lingüístico en pleno uso de su libertad e interés.

           LA JUNTA DE AMICS DE FRAGA

sábado, 15 de junio de 2013

TRADICIÓN: SAN LAMBERTO



Por Eduardo Jiménez Marqués
El viernes 14 de Junio, comienzan en UTEBO las Fiestas de San Lamberto, terminando en el día 19 de Junio, fecha de la onomástica del Santo.
¿Quién fue S. Lamberto? ¿Qué nos dice la tradición?
San Lamberto
Agricultor y santo aragonés. Murió martirizado a principios del siglo IV.
Martirio
Por lo menos desde el siglo XV el Breviario Cesaraugustano recoge en sus Lecciones los detalles que sobre la persona de Lamberto y las circunstancias de su martirio aportaba la tradición local.
Trabajador en el campo zaragozano, como siervo de un señor infiel, por haber rehusado renegar de su fe, fue por éste decapitado, realizándose el singular prodigio de que tomó en sus manos la cabeza, ya cortada, y caminando así largo trecho tras sus bueyes llegó hasta donde yacían los cuerpos de los Mártires de Zaragoza, con los que fue sepultado. Este detalle singular aparece en toda la iconografía del santo y es tema central de la literatura poética sobre el mismo.
Prodigios
Cuando el Papa Adriano VI visitó Zaragoza en 1522 brotó sangre de la mandíbula de San Lamberto en su presencia, siendo esta recogida en un paño que se conserva en la Basílica de Santa Engracia (Zaragoza).
Costumbres
La condición de agricultor del mártir hizo que fuesen especiales devotos suyos los labradores zaragozanos, que, agrupados en una antigua cofradía, cubrían de espigas su sepulcro en su fiesta del 19-VI y paseaban en procesión su estandarte de damasco blanco y su busto de plata sobre peana.
Surgieron en otros pueblos de Aragón cofradías en su honor a imitación de la de Zaragoza; y sobre todo en tiempos recientes en toda la región lo proclamaron patrono muchos Círculos Católicos y Hermandades de Labradores, convirtiéndose de este modo San Lamberto en el «San Isidro aragonés».
Imagen: Cofradía de S. Lamberto y Nuestra Señora del Pilar del barrio de Miralbueno (Zaragoza)

domingo, 9 de junio de 2013

TRADICIONES, MITOS y LEYENDAS : HISTORIA DE ZARAGOZA



Historia de Zaragoza C1
En mis búsquedas de tradiciones, mitos y leyendas de Aragón, he encontrado el libro Compendio de la Historia de Zaragoza de D: Pablo Claramunt, en su 2ª edición del editor Manuel Sevilla y del año 1904.
Si más paso a detallar características del libro escrito por el Sr. Claramunt
Ministerio de Fomento
Dirección General
El Consejo de Instrucción Pública, en sesión celebrada el día 7 de Marzo de 1894, acordó declarar libro de texto para las escuelas de ambos sexos de Aragón, y muy especialmente de las de Zaragoza y todos los pueblos de su provincia, el libro presentado en dicho centro por su autor D.Pablo Claramunt Romeo, titulado: COMPENDIO DE LA HISTORIA DE ZARAGOZA.
Madrid 20 de Marzo de 1894.-
DOS PALABRAS
Amables lectores: Modestas pretensiones son las de quien sin títulos para ello, pero amante de las glorias patrias, intenta inculcarlas en la juventud que hacia el ocaso nos empuja.
El nombre augusto de la muy noble, muy leal, muy heroica, siempre heroica y muy benéfica Zaragoza, cuyos ecos retumban y retumbarán eternamente en los más apartados países, hanme impelido á hacer este libro, imperfecto sin duda alguna, pero lleno del mayor entusiasmo y con el mejor deseo de prestar un verdadero servicio a los hijos de la inmortal Zaragoza.
Si no lo consigo, no culpéis á mi buena intención, sino á la escasa inteligencia con que al Dios de las misericordias plugo dotarme.
Creo, que así como los griegos tienen siempre presentes y cantan en todos los tonos sus glorias, heroicos hechos y laudables proezas, los demás pueblos tenemos el ineludible deber de imitarles.
Y como tan solo el nombre de la inmortal Zaragoza significa una epopeya, entiendo que no es justo que la inmensa mayoría de sus nobles hijos ignoren los principales hechos del pueblo en que nacieron.
Por esto me he decidido a decir algo a grandes rasgos de su interesante historia; si consigo agradar a mis lectores é inculco en la juventud un poco de lo mucho que de esta inmortal ciudad puede escribirse, será la mejor recompensa y mayor satisfacción que habrá podido alcanzar en todos los días de su vida vuestro afectísimo seguro servidor.
PABLO CLARAMUNT

martes, 4 de junio de 2013

MITOS: TUBAL



TUBAL
Los mitos generalmente hunden sus raíces en las Sagradas Escrituras, apareciendo nuestra actual civilización, después del castigo divino del Diluvio Universal. Desparece una población y aparecen unos nuevos pobladores, los descendientes de NOE uno de los que tuvo mayor importancia en nuestra cultura aragonesa es TUBAL
Túbal (en el idioma asirio es Tabal y en el idioma griego es Tibarenoi) fue, según los escritos de la Biblia, hijo de Jafet y nieto de Noé..
Se le atribuyen la fundación las ciudades de Tarazona, Zaragoza, Tafalla y Tudela en España.
En Portugal, una leyenda atribuye a Túbal la fundación de la ciudad de Setúbal.
También los montes Setúbales fueron nombrados así por él, que actualmente es la cordillera de los Pirineos.

El conocimiento de la forma de trabajar el hierro y el cobre se difundió desde el Asia Menor para llegar a todo el Oriente Próximo, con lo que el nombre del personaje
Túbal está muy relacionado con el de la tribu del Asia Menor Túbal, por sus conocimientos de los metales.
La tribu Túbal es una tribu sudoriental del Asia Menor que siempre aparece mencionada en conjunto con la tribu de Mesec o Mesej en la tradición cuneiforme asiria en los escritos griegos y en la Biblia, que vivieron especificamente en Cilicia. En la Biblia aparecen mencionados y descritos en el Libro de Ezequiel y en el Libro de Isaías para el siglo VII a. C., donde se les considera buenos guerreros, orfebres y vendedores de esclavos. En el Génesis se los cuenta entre los hijos de Jafet. Los cimerios los habrían hecho retirarse a la zona montañosa oriental del Mar Negro, posiblemente a Georgia —Generalmente se cree que de la Iberia caucásica, la actual Georgia, emigraron, estos íberos, a España, donde habitaron la Península Ibérica— y en momentos dados de su historia fueron aliados de los escitas y de otras tribus para comerciar, guerrear y defenderse de sus enemigos comunes, (Gén. 10:2, Ez. 27:13, Is. 66:19).
El obispo Isidoro de Sevilla recogió una tradición sobre Túbal como antecesor de los íberos y de Iberia, también de los italianos o tribus italianas y españolas.
Otra leyenda vasca reafirma esta procedencia de vascos con Aitor, supuestamente hijo de Túbal .
De este modo, Túbal, tras haber engendrado una serie de pueblos en la Iberia caucásica, se trasladó como su primer rey a la Península Ibérica, también llamada Iberia. Engendró un gran número de futuros reyes, la dinastía tubalita, empezando por su primer hijo Íbero, quien daría nombre tanto a la Península como al río Ebro. Así, fueron cuatro los monarcas los que sucedieron a Íbero hasta que acabó su línea sucesoria, según la mitología.
Estos fueron, en orden cronológico, Idibeda, Brigo, Tago —por quien llaman así al río Tajo— y Beto, quien dio nombre al río Betis, actual Guadalquivir, y Bética a las tierras colindantes.1