TUBAL
Los mitos generalmente hunden sus raíces en las Sagradas
Escrituras, apareciendo nuestra actual civilización, después del castigo divino
del Diluvio Universal. Desparece una población y aparecen unos nuevos
pobladores, los descendientes de NOE uno de los que tuvo mayor importancia en
nuestra cultura aragonesa es TUBAL
Túbal (en el idioma asirio es Tabal y en el idioma griego es
Tibarenoi) fue, según los escritos de la Biblia, hijo de Jafet y nieto de Noé..
Se le atribuyen la fundación las ciudades de Tarazona, Zaragoza,
Tafalla y Tudela en España.
En Portugal, una leyenda atribuye a Túbal la fundación de la
ciudad de Setúbal.
También los montes Setúbales fueron nombrados así por él, que
actualmente es la cordillera de los Pirineos.
El conocimiento de la forma de trabajar el hierro y el cobre
se difundió desde el Asia Menor para llegar a todo el Oriente Próximo, con lo
que el nombre del personaje
Túbal está muy relacionado con el de la tribu del Asia Menor
Túbal, por sus conocimientos de los metales.
La tribu Túbal es una tribu sudoriental del Asia Menor que
siempre aparece mencionada en conjunto con la tribu de Mesec o Mesej en la
tradición cuneiforme asiria en los escritos griegos y en la Biblia, que
vivieron especificamente en Cilicia. En la Biblia aparecen mencionados y
descritos en el Libro de Ezequiel y en el Libro de Isaías para el siglo VII a.
C., donde se les considera buenos guerreros, orfebres y vendedores de esclavos.
En el Génesis se los cuenta entre los hijos de Jafet. Los cimerios los habrían
hecho retirarse a la zona montañosa oriental del Mar Negro, posiblemente a
Georgia —Generalmente se cree que de la Iberia caucásica, la actual Georgia,
emigraron, estos íberos, a España, donde habitaron la Península Ibérica— y en
momentos dados de su historia fueron aliados de los escitas y de otras tribus
para comerciar, guerrear y defenderse de sus enemigos comunes, (Gén. 10:2, Ez.
27:13, Is. 66:19).
El obispo Isidoro de Sevilla recogió una tradición sobre Túbal
como antecesor de los íberos y de Iberia, también de los italianos o tribus
italianas y españolas.
Otra leyenda vasca reafirma esta procedencia de vascos con
Aitor, supuestamente hijo de Túbal .
De este modo, Túbal, tras haber engendrado una serie de
pueblos en la Iberia caucásica, se trasladó como su primer rey a la Península
Ibérica, también llamada Iberia. Engendró un gran número de futuros reyes, la
dinastía tubalita, empezando por su primer hijo Íbero, quien daría nombre tanto
a la Península como al río Ebro. Así, fueron cuatro los monarcas los que
sucedieron a Íbero hasta que acabó su línea sucesoria, según la mitología.
Estos fueron, en orden cronológico, Idibeda, Brigo, Tago —por
quien llaman así al río Tajo— y Beto, quien dio nombre al río Betis, actual Guadalquivir,
y Bética a las tierras colindantes.1
No hay comentarios:
Publicar un comentario